22. ¡Miren que saltó fuego de mi cólera y la llama consume hastaele mundo de abajo, devora la tierra y sus frutos, abrasa los cimientos de los cerros!





“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina