Found 1919 Results for: San
el que ata a la vid su borriquillo y a la cepa el pollino de su asna; lava en vino su vestimenta, y en sangre de uvas su sayo; (Génesis 49, 11)
El respondió: «¿Quién te ha puesto de jefe y juez sobre nosotros? ¿Acaso estás pensando en matarme como mataste al egipcio?» Moisés, lleno de temor, se dijo: «La cosa ciertamente se sabe.» (Exodo 2, 14)
Le dijo: «No te acerques aquí; quita las sandalias de tus pies, porque el lugar en que estás es tierra sagrada.» (Exodo 3, 5)
Y si no creen tampoco por estas dos señales y no escuchan tu voz, tomarás agua del Río y la derramarás en el suelo; y el agua que saques del Río se convertirá en sangre sobre el suelo.» (Exodo 4, 9)
Tomó entonces Seforá un cuchillo de pedernal y, cortando el prepucio de su hijo, tocó los pies de Moisés, diciendo: «Tú eres para mí esposo de sangre.» (Exodo 4, 25)
Y Yahveh le soltó; ella había dicho: «esposo de sangre», por la circuncisión. (Exodo 4, 26)
Así dice Yahveh: En esto conoceras que yo soy Yahveh: Mira que voy a golpear con el cayado que tengo en la mano las aguas del Río, y se convertirán en sangre. (Exodo 7, 17)
Yahveh dijo a Moisés: «Di a Aarón: Toma tu cayado, y extiende tu mano sobre las aguas de Egipto, sobre sus canales, sobre sus ríos, sobre sus lagunas y sobre todos sus depósitos de agua. Se convertirán en sangre; y habrá sangre en toda la tierra de Egipto, hasta en los árboles y la piedras.» (Exodo 7, 19)
Moisés y Aarón hicieron lo que Yahveh les había mandado: alzó el cayado y golpeó las aguas que hay en el Rió en presencia de Faraón y de sus servidores, y todas las aguas del Rió se convirtieron en sangre. (Exodo 7, 20)
Los peces del Río murieron, el Río quedó apestado de modo que los egipcios nos pudieron beber el agua del Río; hubo sangre en todo el país de Egipto. (Exodo 7, 21)
Luego tomarán la sangre y untarán las dos jambas y el dintel de las casas donde lo coman. (Exodo 12, 7)
La sangre será vuestra señal en las casas donde moráis. Cuando yo vea la sangre pasaré de largo ante vosotros, y no habrá entre vosotros plaga exterminadora cuando yo hiera el país de Egipto. (Exodo 12, 13)