Found 56 Results for: ley de venganza

  • Si un hombre golpea a su siervo o a su sierva con un palo y muere a sus manos, cae bajo la ley de venganza. (Exodo 21, 20)

  • Si el ladrón, sorprendido al perforar la pared, es herido mortalmente, no habrá venganza de sangre. (Exodo 22, 1)

  • «Haz que los israelitas tomen venganza de los madianitas. Luego irás a reunirte con tu parentela.» (Números 31, 2)

  • Moisés habló al pueblo y le dijo: «Que se armen algunos de vosotros para la guerra de Yahveh contra Madián, para tomar de Madián la venganza de Yahveh. (Números 31, 3)

  • Cuando construyas una casa nueva, pondrás un pretil a tu azotea; así tu casa no incurrirá en la venganza de sangre en el caso de que alguno se cayera de allí. (Deuteronomio 22, 8)

  • A mí me toca la venganza y el pago para el momento en que su pie vacile. Porque está cerca el día de su ruina, ya se precipita lo que les espera. (Deuteronomio 32, 35)

  • cuando afile el rayo de mi espada, y mi mano empuñe el Juicio, tomaré venganza de mis adversarios, y daré el pago a quienes me aborrecen. (Deuteronomio 32, 41)

  • ¡Cielos, exultad con él, y adórenle los hijos de Dios! ¡Exultad, naciones, con su pueblo, y todos los mensajeros de Dios narren su fuerza! Porque él vengará la sangre de sus siervos, tomará venganza de sus adversarios, dará su pago a quienes le aborrecen y purificará el suelo de su pueblo. (Deuteronomio 32, 43)

  • Llevaron la cabeza de Isbaal a David, en Hebrón, y dijeron al rey: «Aquí tienes la cabeza de Isbaal, hijo de Saúl, tu enemigo, el que buscó tu muerte. Hoy ha concedido Yahveh a mi señor el rey venganza sobre Saúl y sobre su descendencia.» (II Samuel 4, 8)

  • El Dios que la venganza me concede y abate los pueblos a mis plantas. (II Samuel 22, 48)

  • Nabucodonosor experimentó una gran cólera contra toda aquella tierra y juró por su trono y por su reino que tomaría venganza y pasaría a cuchillo todo el territorio de Cilicia, Damasco y Siria, y a todos los habitantes de Moab, a los ammonitas, a toda la Judea y a todos los de Egipto, hasta los confines de los dos mares. (Judit 1, 12)

  • El año dieciocho, el día veintidós del primer mes, se celebró consejo en el palacio de Nabucodonosor, rey de Asiria, en orden a la venganza que había de tomarse a toda aquella tierra, tal como lo había anunciado. (Judit 2, 1)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina