Found 353 Results for: piedras grandes

  • Yo la he hecho salir - oráculo de Yahveh Sebaot - para que entre en casa del ladrón y en casa del que jura por mi nombre en falso, para que se aloje en medio de su casa y la consuma, con su maderamen y sus piedras.» (Zacarías 5, 4)

  • Así dice Yahveh Sebaot: Todavía habrá pueblos que vengan, y habitantes de grandes ciudades. (Zacarías 8, 20)

  • Yahveh Sebaot los escudará; y devorarán y pisotearán las piedras de la honda, beberán la sangre como vino, y se llenarán como copa de aspersiones, como los cuernos del altar. (Zacarías 9, 15)

  • Los salvará Yahveh su Dios el día aquel, como rebaño de su pueblo, porque serán piedras de diadema refulgentes sobre su suelo. (Zacarías 9, 16)

  • y no creáis que basta con decir en vuestro interior: "Tenemos por padre a Abraham"; porque os digo que puede Dios de estas piedras dar hijos a Abraham. (Mateo 3, 9)

  • Y acercándose el tentador, le dijo: «Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes.» (Mateo 4, 3)

  • Pero al que escandalice a uno de estos pequeños que creen en mí, más le vale que le cuelguen al cuello una de esas piedras de molino que mueven los asnos, y le hundan en lo profundo del mar. (Mateo 18, 6)

  • Mas Jesús los llamó y dijo: «Sabéis que los jefes de las naciones las dominan como señores absolutos, y los grandes las oprimen con su poder. (Mateo 20, 25)

  • Porque surgirán falsos cristos y falsos profetas, que harán grandes señales y prodigios, capaces de engañar, si fuera posible, a los mismos elegidos. (Mateo 24, 24)

  • pero una vez sembrada, crece y se hace mayor que todas las hortalizas y echa ramas tan grandes que las aves del cielo anidan a su sombra.» (Marcos 4, 32)

  • Y siempre, noche y día, andaba entre los sepulcros y por los montes, dando gritos e hiriéndose con piedras. (Marcos 5, 5)

  • Llegan a la casa del jefe de la sinagoga y observa el alboroto, unos que lloraban y otros que daban grandes alaridos. (Marcos 5, 38)


“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina