Found 222 Results for: Josué

  • Moisés dijo a Josué: "Escoge hombres y sal a luchar contra Amalec. Yo estaré en la cima de la colina teniendo en la mano el bastón de Dios". (Exodo 17, 9)

  • Josué hizo como le había ordenado Moisés, y luchó contra Amalec. Moisés, Aarón y Jur subieron a la cima de la colina. (Exodo 17, 10)

  • Josué derrotó a Amalec y a su ejército a filo de espada. (Exodo 17, 13)

  • El Señor dijo a Moisés: "Pon esto por escrito, para recuerdo, en un libro, y asegura a Josué que yo borraré por completo la memoria de Amalec de debajo del cielo". (Exodo 17, 14)

  • Moisés se levantó con Josué, su ministro, y antes de subir a la montaña (Exodo 24, 13)

  • Josué oyó el fuerte griterío del pueblo y dijo a Moisés: "Grito de guerra hay en el campamento". (Exodo 32, 17)

  • El Señor hablaba a Moisés cara a cara, como se habla entre amigos. Luego Moisés volvía al campamento; pero Josué, su ministro, hijo de Nun, joven todavía, no se apartaba de la tienda. (Exodo 33, 11)

  • Josué, hijo de Nun, que desde su juventud había servido a Moisés, dijo: "Señor mío Moisés, prohíbeselo". (Números 11, 28)

  • Éstos son los nombres de los exploradores que Moisés envió a reconocer la tierra. Moisés dio a Osea, hijo de Nun, el nombre de Josué. (Números 13, 16)

  • Y Josué, hijo de Nun, y Caleb, hijo de Jefoné, que habían estado entre los exploradores de la tierra, se rasgaron las vestiduras (Números 14, 6)

  • Os juro que no entraréis en la tierra en la que, mano en alto, había jurado estableceros, excepto Caleb, hijo de Jefoné, y Josué, hijo de Nun. (Números 14, 30)

  • Solamente Josué, hijo de Nun, y Caleb, hijo de Jefoné, quedaron con vida entre los hombres que habían ido a explorar la tierra. (Números 14, 38)


“Não queremos aceitar o fato de que o sofrimento é necessário para nossa alma e de que a cruz deve ser o nosso pão cotidiano. Assim como o corpo precisa ser nutrido, também a alma precisa da cruz, dia a dia, para purificá-la e desapegá-la das coisas terrenas. Não queremos entender que Deus não quer e não pode salvar-nos nem santificar-nos sem a cruz. Quanto mais Ele chama uma alma a Si, mais a santifica por meio da cruz.” São Padre Pio de Pietrelcina