Found 12 Results for: protección

  • Concédeles, Señor, tu misericordia y tu protección, y una vida llena de alegría y felicidad". (Tobías 8, 17)

  • Edna, a su vez, dijo a Tobías: "Hijo y hermano querido, quiera el Señor que vuelvas y que yo vea a vuestros hijos antes de morir. Confío mi hija a tu protección. No la hagas sufrir. Vete en paz. Desde ahora yo soy tu madre, y Sara, tu mujer. Que vivamos todos felices durante toda nuestra vida". Los besó y los dejó partir en paz. (Tobías 10, 13)

  • Ozías lo llevó a su casa y ofreció un banquete a los ancianos. Pasaron toda la noche invocando la protección del Dios de Israel. (Judit 6, 21)

  • Tú que vives bajo la protección del Dios altísimo y moras a la sombra del Dios omnipotente, (Salmos 91, 1)

  • Y el que a muchos había obligado a salir de la patria, pereció en tierra extranjera, entre los lacedemonios, en quienes pensaba encontrar protección en gracia de los lazos de familia. (II Macabeos 5, 9)

  • por tanto, todos los que para ello se pongan en camino antes del 30 del mes de xántico contarán con nuestra protección y seguridad. (II Macabeos 11, 30)

  • que para sus elegidos hay gracia y misericordia, y para sus santos protección. (Sabiduría 4, 15)

  • Entonces sus grillos serán para ti fuerte protección, sus argollas glorioso vestido. (Eclesiástico 6, 29)

  • Los ojos del Señor se posan sobre quienes lo aman: poderosa protección y fuerte apoyo, abrigo contra el viento abrasador y sombra contra el calor del mediodía, guarda contra el tropiezo y auxilio contra la caída. (Eclesiástico 34, 16)

  • ha caído la protección de Judá. Tú volviste los ojos aquel día al arsenal de la casa del bosque. (Isaías 22, 8)

  • a menos que se acojan a mi protección y hagan la paz conmigo; sí, la paz hagan conmigo. (Isaías 27, 5)

  • En aquel día el Señor manifestará su protección a los habitantes de Jerusalén, y ocurrirá que los que se tambalean de entre ellos serán como David, y la casa de David será como Dios, como un ángel del Señor a su vista. (Zacarías 12, 8)


“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina