Found 115 Results for: trabajo

  • El primer día es día de asamblea santa; no haréis en él trabajo alguno. (Levítico 23, 35)

  • Los siete días presentaréis ofrendas quemadas en honor del Señor; el día octavo celebraréis asamblea santa y presentaréis una ofrenda quemada en honor del Señor: es día de asamblea; no haréis en él trabajo alguno. (Levítico 23, 36)

  • Será considerado como un jornalero que se ajusta por año de trabajo. No permitirás que se le trate con dureza delante de tus ojos. (Levítico 25, 53)

  • Os ayudará en este trabajo un hombre por cada tribu, jefe de familia. (Números 1, 4)

  • El primer día habrá asamblea santa; no haréis ningún trabajo. (Números 28, 18)

  • El séptimo día tendréis asamblea santa; no haréis ningún trabajo". (Números 28, 25)

  • "El día de las primicias, cuando vayáis a presentar al Señor la ofrenda de los frutos nuevos en vuestra fiesta de las semanas, tendréis asamblea santa; no haréis ningún trabajo. (Números 28, 26)

  • "El primer día del séptimo mes tendréis asamblea santa; no haréis ningún trabajo. Será para vosotros éste el día de las aclamaciones. (Números 29, 1)

  • El diez del mismo séptimo mes tendréis asamblea santa; ayunaréis y no haréis ningún trabajo. (Números 29, 7)

  • El día quince del séptimo mes tendréis asamblea santa y no haréis en él ningún trabajo. Celebraréis fiesta en honor del Señor durante siete días. (Números 29, 12)

  • El día octavo tendréis consejo, y no haréis en él ningún trabajo. (Números 29, 35)

  • Pero el séptimo es descanso para el Señor, tu Dios: no harás en él trabajo alguno, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu buey, ni tu asno, ni ninguna de tus bestias, ni el extranjero residente; de esta manera podrán descansar tu siervo y tu sierva lo mismo que tú. (Deuteronomio 5, 14)


“Você deve ter sempre prudência e amor. A prudência tem olhos; o amor tem pernas. O amor, como tem pernas, gostaria de correr a Deus. Mas seu impulso de deslanchar na direção dEle é cego e, algumas vezes, pode tropeçar se não for guiado pela prudência, que tem olhos.” São Padre Pio de Pietrelcina