Found 258 Results for: vender a José

  • Tal era la heredad de los hijos de José: Manasés y Efraín. (Josué 16, 4)

  • Éste es el territorio que tocó en suerte a la tribu de Manasés, el primogénito de José. A Maquir, primogénito de Manasés y padre de Galaad, hombre de guerra, le cayó en suerte Galaad y Basán. (Josué 17, 1)

  • Los hijos de José dijeron a Josué: "¿Cómo nos has dado en heredad una sola parte, una sola porción, siendo un pueblo numeroso, al que el Señor ha bendecido hasta ahora?". (Josué 17, 14)

  • Los hijos de José replicaron: "La montaña no nos basta; pero los cananeos que viven en la llanura tienen carros de hierro, lo mismo que los de Betsán y sus aldeas y los de la llanura de Yezrael". (Josué 17, 16)

  • Josué respondió a los hijos de José, a Efraín y Manasés: "Vosotros sois un pueblo numeroso y vuestra fuerza es grande; no tendréis una sola parte, (Josué 17, 17)

  • La dividirán en siete partes. "Judá permanecerá en su territorio, al sur, y los de la casa de José quedarán en su territorio, al norte. (Josué 18, 5)

  • Salió la suerte de Benjamín por clanes, y el territorio que les tocó estaba entre Judá y José. (Josué 18, 11)

  • Los huesos de José, que los israelitas habían traído de Egipto, fueron sepultados en Siquén, en la parte del campo que Jacob había comprado por cien monedas de plata a los hijos de Jamor, padre de Siquén, y que pasó a ser propiedad de los hijos de José. (Josué 24, 32)

  • A su vez, la casa de José subió contra Betel, y el Señor estuvo con ella. (Jueces 1, 22)

  • los amorreos se mantuvieron en Har Jeres, en Ayalón y en Saalbín, pero cuando creció el poder de la casa de José fueron sometidos a trabajos forzados. (Jueces 1, 35)

  • Porque tu siervo reconoce que ha pecado, y por eso he venido el primero de toda la casa de José para bajar al encuentro de mi señor, el rey". (II Samuel 19, 21)

  • Jeroboán era fuerte y vigoroso; y Salomón, viendo cómo cumplía aquel joven su tarea, le puso al frente de todas las prestaciones personales de la casa de José. (I Reyes 11, 28)


“Padre, eu não acredito no inferno – falou um penitente. Padre Pio disse: Acreditará quando for para lá?” São Padre Pio de Pietrelcina