7. Los maridos, a su vez, comprendan que deben compartir su vida con un ser más débil, como es la mujer: trátenla con el respeto debido a coherederas de la gracia que da la Vida. De esa manera, nada será obstáculo para la oración.





“Deus não opera prodígios onde não há fé.” São Padre Pio de Pietrelcina