23. Los amonitas y los moabitas se levantaron contra los habitantes de las montañas de Seír, para consagrarlos al exterminio total y aniquilarlos, y cuando acabaron con los habitantes de Seír, se destruyeron mutuamente.





“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina