II Samuel, 1
27. ¡Cómo han caído los héroes, cómo han perecido las armas del combate!".
27. ¡Cómo han caído los héroes, cómo han perecido las armas del combate!".
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina