7. Los habitantes de las ciudades y todos los de los contornos salieron a recibirle con coronas y danzando al son de tambores.





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina