Levítico, 4
6. El sacerdote mojará su dedo en la sangre y rociará con ella siete veces ante Yahveh frente al velo del Santuario.
6. El sacerdote mojará su dedo en la sangre y rociará con ella siete veces ante Yahveh frente al velo del Santuario.
“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina