26. Lo pesé y les entregué veintidós mil kilos de plata; utensilios de plata que pesaban tres mil cuatrocientos kilos; tres mil cuatrocientos kilos de oro;





“É sempre necessário ir para a frente, nunca para trás, na vida espiritual. O barco que pára em vez de ir adiante é empurrado para trás pelo vento.” São Padre Pio de Pietrelcina