Fundar 2088 Resultados para: Unión de Israel

  • Yavé ruge desde Sión y desde Jerusalén hace oír su voz. Los cielos y la tierra se han conmovido. Porque Yavé es un refugio para su pueblo y un asilo para los hijos de Israel. (Joel 4, 16)

  • Palabras de Amós, uno de los intendentes de los pastores de Tecoa. Estas son las revelaciones que tuvo acerca de Israel, en tiempo de Ozías, rey de Judá; y en tiempos de Jeroboam, hijo de Joás, rey de Israel, dos años antes del terremoto. (Amós 1, 1)

  • Así dice Yavé: «Mi sentencia en contra de Edom por sus muchos crímenes será sin apelación. Porque ha perseguido con espada a su hermano Israel ahogando todo sentimiento de piedad, porque le tiene un odio siempre vivo y le guarda un rencor que nunca pasa, (Amós 1, 11)

  • Así dice Yavé: «Mi sentencia en contra de Israel por sus muchos crímenes será sin apelación. Porque venden al inocente por dinero y al necesitado por un par de sandalias, (Amós 2, 6)

  • Yo, de entre tus hijos hice surgir profetas y me consagraba tus jóvenes como nazireos. ¿No es así, hijos de Israel? (Amós 2, 11)

  • Y agrega todavía Yavé: Como las dos patas o la punta de una oreja que el pastor salva de la boca del león, así será el resto de los hijos de Israel que en Samaria se sientan en la espuma de un sofá, sobre cojines de Damasco. (Amós 3, 12)

  • Cuando yo llegue a tomar cuentas de sus crímenes a Israel, ese día yo iré derecho a los altares de Betel: quebraré los cuernos del altar y los tiraré al suelo. (Amós 3, 14)

  • Quemen, para dar gracias, panes sin levadura, y anuncien a los cuatro vientos sus ofrendas voluntarias, pues eso les gusta a ustedes, hijos de Israel, dice el Señor Yavé. (Amós 4, 5)

  • Por eso ahora vengo a pedirte cuentas, Israel: prepárate a enfrentarte con tu Dios. (Amós 4, 12)

  • Escuchen estas palabras que yo pronuncio contra ustedes, una lamentación por ti, Israel: (Amós 5, 1)

  • Ha caído la virgen de Israel, y no volverá ya a levantarse, postrada está en el suelo, y no hay quien la levante. (Amós 5, 2)

  • Porque así dice Yavé a la gente de Israel: La ciudad de la cual salían mil hombres quedará sólo con cien, y de la que salían cien quedará sólo con diez. (Amós 5, 3)


“A sua casa deve ser uma escada para o Céu”. São Padre Pio de Pietrelcina