Fundar 313 Resultados para: madre

  • y querían ponerle por nombre Zacarías, por llamarse así su padre. Pero la madre dijo: «No, se llamará Juan.» (Evangelio según San Lucas 1, 60)

  • Cumplidos los ocho días, circuncidaron al niño y le pusieron el nombre de Jesús, nombre que había indicado el ángel antes de que su madre quedara embarazada. (Evangelio según San Lucas 2, 21)

  • Su padre y su madre estaban maravillados por todo lo que se decía del niño. (Evangelio según San Lucas 2, 33)

  • Simeón los bendijo y dijo a María, su madre: «Mira, este niño traerá a la gente de Israel ya sea caída o resurrección. Será una señal impugnada en cuanto se manifieste, (Evangelio según San Lucas 2, 34)

  • Sus padres se emocionaron mucho al verlo; su madre le decía: «Hijo, ¿por qué nos has hecho esto? Tu padre y yo hemos estado muy angustiados mientras te buscábamos.» (Evangelio según San Lucas 2, 48)

  • Jesús entonces regresó con ellos, llegando a Nazaret. Posteriormente siguió obedeciéndoles. Su madre, por su parte, guardaba todas estas cosas en su corazón. (Evangelio según San Lucas 2, 51)

  • Cuando llegó a la puerta del pueblo, sacaban a enterrar a un muerto: era el hijo único de su madre, que era viuda, y mucha gente del pueblo la acompañaba. (Evangelio según San Lucas 7, 12)

  • Se incorporó el muerto inmediatamente y se puso a hablar. Y Jesús se lo entregó a su madre. (Evangelio según San Lucas 7, 15)

  • Su madre y sus hermanos querían verlo, pero no podían llegar hasta él por el gentío que había. (Evangelio según San Lucas 8, 19)

  • Alguien dio a Jesús este recado: «Tu madre y tus hermanos están fuera y quieren verte.» (Evangelio según San Lucas 8, 20)

  • Jesús respondió: «Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen.» (Evangelio según San Lucas 8, 21)

  • Al llegar a la casa, no permitió entrar con él más que a Pedro, Juan y Santiago, y al padre y la madre de la niña. (Evangelio según San Lucas 8, 51)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina