Fundar 366 Resultados para: altar de oro

  • Entró altivamente en el templo y se apoderó del altar de oro, del candelabro con todos sus accesorios, (I Macabeos 1, 21)

  • El 15 del mes de quisleu del año 145, Antíoco levantó un ídolo repugnante sobre el altar de los holocaustos y edificó altares en todas las ciudades circunvecinas de Judá. (I Macabeos 1, 54)

  • El 25 del mes ofrecían sacrificios en el altar construido sobre el altar antiguo. (I Macabeos 1, 59)

  • Matatías al verlo se llenó de celo y se estremecieron sus entrañas; y encendido en justa ira, se arrojó sobre él y lo mató sobre el altar. (I Macabeos 2, 24)

  • Al mismo tiempo mató al emisario del rey por obligar al pueblo a ofrecer sacrificios, y después destruyó el altar. (I Macabeos 2, 25)

  • Cuando vieron el templo desierto, el altar profanado, quemadas las puertas, la hierba crecida en los atrios, como en el bosque o en los montes, y derruidas las habitaciones, (I Macabeos 4, 38)

  • Deliberaron sobre el altar de los holocaustos, que había sido profanado, y (I Macabeos 4, 44)

  • Tomaron piedras sin labrar, según la ley, y levantaron un altar igual que el primero. (I Macabeos 4, 47)

  • hicieron nuevos vasos sagrados, llevaron al templo el candelabro, el altar de los perfumes y la mesa. (I Macabeos 4, 49)

  • Quemaron incienso sobre el altar y encendieron las lámparas del candelabro, que iluminaron el interior del templo. (I Macabeos 4, 50)

  • y ofrecieron un sacrificio legal en el altar de los holocaustos que habían construido. (I Macabeos 4, 53)

  • El altar fue inaugurado al son de cítaras, liras y címbalos en el mismo mes y día en que fue profanado por los gentiles. (I Macabeos 4, 54)


“Pobres e desafortunadas as almas que se envolvem no turbilhão de preocupações deste mundo. Quanto mais amam o mundo, mais suas paixões crescem, mais queimam de desejos, mais se tornam incapazes de atingir seus objetivos. E vêm, então, as inquietações, as impaciências e terríveis sofrimentos profundos, pois seus corações não palpitam com a caridade e o amor. Rezemos por essas almas desafortunadas e miseráveis, para que Jesus, em Sua infinita misericórdia, possa perdoá-las e conduzi-las a Ele.” São Padre Pio de Pietrelcina