39. pasa igual que para quien toma vino: no vale nada beber vino puro o sólo agua, sino que todo el placer y el contento del que bebe depende del arte con que se mezcló el vino con agua. Esta será mi última palabra.





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina