Löydetty 52 Tulokset: Abundancia

  • Para pagar su instrucción no sería suficiente un montón de plata; con ella, en cambio, tendrán oro en abundancia. (Sirácides (Eclesiástico) 51, 28)

  • Darán leche en abundancia y cuantos queden en el país se alimentarán de leche cuajada y miel. (Isaías 7, 22)

  • Entonces, la carga se caerá de tu espalda, su yugo dejará de pesar en tu cuello, y la abundancia reemplazará la opresión.. (Isaías 10, 27)

  • Era el más alto de los árboles del campo, sus ramas se habían multiplicado, su ramaje cubría todo su derredor gracias a la abundancia de las aguas. (Ezequiel 31, 5)

  • Haré que la tierra produzca en abundancia. Ya no experimentarán más hambre, ni pasarán más esa humillación ante los demás pueblos. (Ezequiel 34, 29)

  • Los libraré de todas sus impurezas. Llamaré al trigo y brotará en abundancia; no les enviaré más hambrunas. (Ezequiel 36, 29)

  • sino trátanos de acuerdo a tu bondad y según la abundancia de tu misericordia. (Daniel 3, 42)

  • Ella no veía que era yo el que le daba el trigo, el vino y el aceite y quien le proporcionaba en abundancia la plata y el oro que empleó para fabricar el Baal. (Oseas 2, 10)

  • Israel era una viña excelente que daba uva en abundancia. Cuanto más eran loos frutos, más multiplicaba sus altares; mientras mejor le iba al país, más embellecía sus pilares sagrados. (Oseas 10, 1)

  • Feliz y contento por su pesca, le ofrece sacrificios a su red, quema incienso a sus mallas, pues a ellas les debe que haya pescado tanto y tenga que comer en abundancia. (Habacuc 1, 16)

  • En mis ciudades habrá abundancia de todo. Yavé tendrá una vez más piedad de Sión y volverá a hacer de Jerusalén su predilecta.» (Zacarías 1, 17)

  • Porque al que tiene se le dará más y tendrá en abundancia, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. (Evangelio según San Mateo 13, 12)


“Amar significa dar aos outros – especialmente a quem precisa e a quem sofre – o que de melhor temos em nós mesmos e de nós mesmos; e de dá-lo sorridentes e felizes, renunciando ao nosso egoísmo, à nossa alegria, ao nosso prazer e ao nosso orgulho”. São Padre Pio de Pietrelcina