Löydetty 35 Tulokset: Acostó

  • pero Urías se acostó a la entra da del palacio con los servidores del rey y no bajó a su casa. (2 Samuel 11, 9)

  • Amnón se acostó y fingió estar enfermo. Vino el rey a visitarlo, y Amnón le dijo: «Permite que venga mi hermana Tamar y prepare delante de mí un par de tortas; yo las tomaré de su mano.» (2 Samuel 13, 6)

  • Su hermano Absalón le dijo: «¿Así que tu hermano Amnón se acostó contigo?... Pero, no importa, hermana mía, pues, al fin y al cabo, es tu hermano. ¡Quédate por ahora callada!» Y Tamar permaneció muy triste en casa de su hermano Absalón. (2 Samuel 13, 20)

  • El rey se levantó, rasgó sus vestiduras y se acostó en el suelo; sus servidores también rasgaron sus vestiduras, pero permanecieron de pie a su lado. (2 Samuel 13, 31)

  • Entonces se levantó ella durante la noche y tomó a mi hijo de mi lado, mientras yo dormía, y lo acostó con ella, y a su hijo muerto lo puso conmigo. (1 Reyes 3, 20)

  • Elías respondió: «Dame tu hijo.» Ella, que lo tenía en su seno, se lo pasó;y él se lo llevó a su pieza que quedaba en el piso superior, y lo acostó en su cama. (1 Reyes 17, 19)

  • Después se acostó y se quedó dormido debajo del árbol. Un ángel vino a tocar a Elías y lo despertó diciendo: «Levántate y come.» (1 Reyes 19, 5)

  • Ajab, pues, se fue a su casa triste y enojado por la respuesta de Nabot, que quería guardar la herencia de sus padres. Se acostó sin querer comer y con la cara hacia la pared. (1 Reyes 21, 4)

  • Cuando Ajab oyó estas palabras, rasgó sus ropas y se puso un saco sobre el cuerpo, ayunó y se acostó con el saco puesto, y andaba cabizbajo. (1 Reyes 21, 27)

  • Cuando Josafat se acostó con sus padres, lo sepultaron al lado de ellos en la ciudad de David, y Joram, su hijo, le sucedió. (1 Reyes 22, 51)

  • Un día pasó Eliseo. Se fue a la habitación de la terraza y se acostó. (2 Reyes 4, 11)

  • Entonces la madre subió y lo acostó sobre la cama de Eliseo. Cerró la puerta y salió. (2 Reyes 4, 21)


“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina