Löydetty 4229 Tulokset: Ada

  • Pero brotaron detrás de ellas siete espigas pequeñas, vacías y quemadas por el viento. (Génesis 41, 23)

  • Las siete vacas hermosas, al igual que las siete espigas granadas, son siete años de abundancia. (Génesis 41, 26)

  • Las siete vacas feas y raquíticas que salieron detrás, al igual que las siete espigas vacías y quemadas por el viento del este, son siete años de hambre. (Génesis 41, 27)

  • José juntó todos los víveres producidos en estos años de abundancia e hizo reservas en las ciudades; en cada ciudad almacenó los productos del campo de sus alrededores. (Génesis 41, 48)

  • José mandó llenar de trigo sus bolsas, devolverle a cada uno dentro de su bolsa su dinero, y también que se les dieran provisiones para el camino. Y así se hizo. (Génesis 42, 25)

  • pero nosotros le dijimos: "Nosotros somos gente honrada y no espías. (Génesis 42, 31)

  • Pero traíganme a su hermano menor, y así conoceré que ustedes son personas honradas y no espías. Sólo entonces les devolveré a su hermano y podrán moverse libremente por este país."» (Génesis 42, 34)

  • Ahora bien, cuando vaciaron sus bolsas, cada uno de ellos encontró su dinero en la boca de la misma. Este descubrimiento les produjo temor a ellos y a su padre. (Génesis 42, 35)

  • y cuando en la posada abrimos nuestras bolsas, el dinero de cada uno estaba en la boca de las bolsas. Contamos bien la plata y ahora la traemos aquí para devolverla. (Génesis 43, 21)

  • Entonces José ordenó a su mayordomo: «Llena de alimentos las bolsas de estos hombres, todo lo que puedan llevar, y coloca el dinero de cada uno en la boca de su bolsa. (Génesis 44, 1)

  • Rápidamente bajó cada uno su bolsa y cada uno la abrió. (Génesis 44, 11)

  • Entonces rasgaron sus ropas, y cargando cada uno su burro, volvieron a la ciudad. (Génesis 44, 13)


“Nossa Senhora está sempre pronta a nos socorrer, mas por acaso o mundo a escuta e se emenda?” São Padre Pio de Pietrelcina