Löydetty 68 Tulokset: Iglesia

  • No den escándalo ni a los judíos, ni a los griegos, ni a la Iglesia de Dios. (1º Carta a los Corintios 10, 32)

  • En primer lugar, según me dicen, cuando se reúnen como Iglesia, se notan divisiones entre ustedes, y en parte lo creo. (1º Carta a los Corintios 11, 18)

  • ¿No tienen sus casas para comer y beber? ¿O es que desprecian a la Iglesia de Dios y quieren avergonzar a los que no tienen nada? ¿Qué les diré? ¿Tendré que aprobarlos? En esto no. (1º Carta a los Corintios 11, 22)

  • En primer lugar están los que Dios hizo apóstoles en la Iglesia; en segundo lugar los profetas; en tercer lugar los maestros; después vienen los milagros, luego el don de curaciones, la asistencia material, la administración en la Iglesia y los diversos dones de lenguas. (1º Carta a los Corintios 12, 28)

  • El que habla en lenguas se fortalece a sí mismo, mientras que el profeta edifica a la Iglesia. (1º Carta a los Corintios 14, 4)

  • Me alegraría que todos ustedes hablaran en lenguas, pero más me gustaría que todos fueran profetas. Es mucho mejor tener profetas que quien hable en lenguas, a no ser que haya quien las interprete y así toda la Iglesia saque provecho. (1º Carta a los Corintios 14, 5)

  • Tomen esto en cuenta, y si se interesan por los dones espirituales, ansíen los que edifican la Iglesia. Así no les faltará nada. (1º Carta a los Corintios 14, 12)

  • Con todo, supongan que la Iglesia entera estuviera reunida y todos hablasen en lenguas y entran algunas personas no preparadas o que todavía no creen. ¿Qué dirían? Que todos están locos. (1º Carta a los Corintios 14, 23)

  • Porque yo soy el último de los apóstoles y ni siquiera merezco ser llamado apóstol, pues perseguí a la Iglesia de Dios. (1º Carta a los Corintios 15, 9)

  • Los saludan las Iglesias de Asia. Aquila y Prisca los saludan en el Señor, junto con la Iglesia que se reúne en su casa. (1º Carta a los Corintios 16, 19)

  • Pablo, apóstol de Cristo Jesús por voluntad de Dios, y el hermano Timoteo saludan a la Iglesia de Dios que está en Corinto, y a los santos que viven en toda Acaya. (2º Carta a los Corintios 1, 1)

  • Ustedes han oído hablar de mi actuación anterior, cuando pertenecía a la comunidad judía, y saben con qué furor perseguía a la Iglesia de Dios y trataba de arrasarla. (Carta a los Gálatas 1, 13)


“Combata vigorosamente, se está interessado em obter o prêmio destinado às almas fortes.” São Padre Pio de Pietrelcina