Löydetty 96 Tulokset: Mensaje Divino

  • Pero, si ustedes aceptan su mensaje, Juan es este Elías que había de venir. (Evangelio según San Mateo 11, 14)

  • Esta Buena Nueva del Reino será proclamada en el mundo entero, y todas las naciones oirán el mensaje; después vendrá el fin. (Evangelio según San Mateo 24, 14)

  • Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre. Mientras todas las razas de la tierra se golpearán el pecho, verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo con el poder divino y la plenitud de la gloria. (Evangelio según San Mateo 24, 30)

  • Juan proclamaba este mensaje: «Detrás de mí viene uno con más poder que yo. Yo no soy digno de desatar la correa de sus sandalias, aunque fuera arrodillándome ante él.» (Evangelio según San Marcos 1, 7)

  • Ellos, por su parte, salieron a predicar en todos los lugares. El Señor actuaba con ellos y confirmaba el mensaje con los milagros que lo acompañaban. (Evangelio según San Marcos 16, 20)

  • ¿Por qué no entienden mi lenguaje? Porque no pueden acoger mi mensaje. (Evangelio según San Juan 8, 43)

  • Yo sé que su mandato es vida eterna, y yo entrego mi mensaje tal como me lo mandó el Padre.» (Evangelio según San Juan 12, 50)

  • El que no me ama no guarda mis palabras; pero el mensaje que escuchan no es mío, sino del Padre que me ha enviado. (Evangelio según San Juan 14, 24)

  • Y cuando venga él, el Espíritu de la Verdad, los guiará en todos los caminos de la verdad. El no viene con un mensaje propio, sino que les dirá lo que escuchó y les anunciará lo que ha de venir. (Evangelio según San Juan 16, 13)

  • El mensaje que recibí se lo he entregado y ellos lo han recibido, y reconocen de verdad que yo he salido de ti y creen que tú me has enviado. (Evangelio según San Juan 17, 8)

  • Yo les he dado tu mensaje, y el mundo los ha odiado, porque no son del mundo como tampoco yo soy del mundo. (Evangelio según San Juan 17, 14)

  • «Vayan, hablen en el Templo y anuncien al pueblo el mensaje de vida.» (Hecho de los Apóstoles 5, 20)


“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina