Löydetty 98 Tulokset: Reina Ester

  • pues nosotros continuaremos haciendo lo que hemos decidido: ofreceremos incienso a la reina del cielo y derramaremos vino en su honor como lo hacíamos nosotros, nuestros padres, nuestros reyes y príncipes en las ciudades de Judá y en los barrios de Jerusalén. Entonces teníamos harto pan, éramos felices y en todo nos iba bien. (Jeremías 44, 17)

  • Pero desde que dejamos de ofrecer incienso a la reina del cielo y de derramar vino en su honor, nos ha faltado de todo y hemos perecido por la espada y de hambre.» (Jeremías 44, 18)

  • Y las mujeres añadieron: «Cuando nosotras ofrecíamos incienso y derramábamos vino en honor de la reina del cielo, ¿acaso era sin permiso de nuestros maridos? (Jeremías 44, 19)

  • Ustedes, mujeres, piensan que tienen la obligación de cumplir los votos que han hecho, y dicen: «Tenemos que cumplir fielmente la proomesa que hemos hecho de ofrecer incienso a la reina del cielo y derramar vino en su honor.» ¡Muy bien! ¡Cumplan sus mandas, derramen su vino! (Jeremías 44, 25)

  • la violencia reina, castiga perversamente. (Ezequiel 7, 11)

  • Tus joyas eran de oro y plata, tus vestidos de lino fino, hechos con telas preciosas todas bordadas. Te alimentabas de harina fina, de miel y de aceite, y quedaste magnífica: un día fuiste la reina. (Ezequiel 16, 13)

  • El rey y sus nobles hicieron tanta bulla que la reina lo supo. Entró, pues, a la sala del banquete y dijo: «Viva el rey para siempre. Que tus pensamientos no te turben ni cambie tu semblante de color. (Daniel 5, 10)

  • La reina del Sur resucitará en el día del juicio junto con los hombres de hoy, y los condenará, porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí ustedes tienen mucho más que Salomón. (Evangelio según San Mateo 12, 42)

  • La reina del Sur resucitará en el día del Juicio junto con la gente de hoy, y los acusará, porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón, y aquí tienen ustedes mucho más que Salomón. (Evangelio según San Lucas 11, 31)

  • Felipe se levantó y se puso en camino. Y justamente pasó un etíope, un eunuco de Candaces, reina de Etiopía, un alto funcionario al que la reina encargaba la administración de su tesoro. Había ido a Jerusalén a rendir culto a Dios, (Hecho de los Apóstoles 8, 27)

  • Con ellos eguían la corriente de este mundo y al soberano que reina entre el cielo y la tierra, el espíritu que ahora está actuando en los corazones rebeldes. (Carta a los Efesios 2, 2)

  • Esa mujer que has visto es la Gran Ciudad, la que reina sobre los reyes del mundo entero.» (Apocalipsis 17, 18)


“Todas as percepções humanas, de onde quer que venham, incluem o bem e o mal. É necessário saber determinar e assimilar todo o bem e oferecê-lo a Deus, e eliminar todo o mal.” São Padre Pio de Pietrelcina