Löydetty 322 Tulokset: diez tribus
y al entrar en un pueblo, le salieron al encuentro diez leprosos. Se detuvieron a cierta distancia (Evangelio según San Lucas 17, 12)
Jesús entonces preguntó: «¿No han sido sanados los diez? ¿Dónde están los otros nueve? (Evangelio según San Lucas 17, 17)
Llamó a diez de sus servidores, les entregó una moneda de oro a cada uno y les dijo: «Comercien con ese dinero hasta que vuelva.» (Evangelio según San Lucas 19, 13)
Se presentó el primero y dijo: «Señor, tu moneda ha producido diez más.» (Evangelio según San Lucas 19, 16)
Le contestó: «Está bien, servidor bueno; ya que fuiste fiel en cosas muy pequeñas, ahora te confío el gobierno de diez ciudades.» (Evangelio según San Lucas 19, 17)
Y dijo el rey a los presentes: «Quítenle la moneda y dénsela al que tiene diez.» (Evangelio según San Lucas 19, 24)
«Pero, señor, le contestaron, ya tiene diez monedas.» (Evangelio según San Lucas 19, 25)
Ustedes comerán y beberán a mi mesa en mi Reino, y se sentarán en tronos para gobernar a las doce tribus de Israel. (Evangelio según San Lucas 22, 30)
Festo no permaneció en Jerusalén más de ocho o diez días y luego volvió a Cesarea. Al día siguiente se sentó en el tribunal y mandó llamar a Pablo. (Hecho de los Apóstoles 25, 6)
de hecho, el culto perpetuo que nuestras doce tribus rinden a Dios noche y día no tiene otro propósito que el de alcanzar esta promesa. Por esta esperanza, oh rey, me acusan los judíos. (Hecho de los Apóstoles 26, 7)
Pues aunque tuvieran diez mil monitores de vida cristiana, no pueden tener muchos padres, y he sido yo quien les transmitió la vida en Cristo Jesús por medio del Evangelio. (1º Carta a los Corintios 4, 15)
Pero cuando me encuentro en la asamblea prefiero decir cinco palabras mías que sean entendidas y ayuden a los demás, antes que diez mil en lenguas. (1º Carta a los Corintios 14, 19)