Löydetty 197 Tulokset: mesa de los panes

  • Y de su mujer Odés engendró Jobab, Sibías, Mesá, Malkom, (1 Crónicas 8, 9)

  • Y entre sus hermanos estaban los hijos de Quehatitas, que estaban encargados de poner en fila los panes de cada sábado. (1 Crónicas 9, 32)

  • asimismo tenían a su cargo disponer en filas los panes, la flor de harina para la ofrenda, las tortas sin levadura fritas en la sartén, o cocinadas, y toda clase de medidas de capacidad y longitud. (1 Crónicas 23, 29)

  • y el peso de oro para cada una de las mesas de los panes de la ofrenda y el peso de plata para las mesas de plata; (1 Crónicas 28, 16)

  • Te hago saber que voy a edificar una Casa al nombre de Yavé, mi Dios, para consagrársela, para quemar ante él incienso aromático, para la ofrenda perpetua de los panes presentados, y para los holocaustos de la mañana y de la tarde, de los sábados, lunas nuevas, solemnidades de Yavé, nuestro Dios, como se hace siempre en Israel. (2 Crónicas 2, 3)

  • Salomón hizo todos los objetos destinados a la Casa de Dios: el altar de oro, las mesas para los panes de la Ofrenda, (2 Crónicas 4, 19)

  • los manjares de su mesa, las habitaciones de sus servidores, el porte de sus ministros y sus vestidos, sus coperos, con sus trajes, y los sacrificios que ofrecía en la Casa de Yavé, se quedó sin aliento, (2 Crónicas 9, 4)

  • Cada mañana y cada tarde ofrecemos a Yavé víctimas consumidas por el fuego y le presentamos el incienso aromático; los panes ofrecidos están sobre la mesa pura y cada tarde se encienden las lámparas del candelabro de oro, pues nosotros guardamos el ritual de Yavé nuestro Dios, en tanto que ustedes lo han abandonado. (2 Crónicas 13, 11)

  • Fueron luego a las habitaciones del rey Ezequías y le dijeron: «Hemos purificado toda la Casa de Yavé, el altar del holocausto con todos sus utensilios, y la mesa de los panes ofrecidos con todos sus utensilios. (2 Crónicas 29, 18)

  • En mi mesa se sentaban ciento cincuenta personas entre jefes y consejeros, sin contar los que venían de las naciones vecinas. (Nehemías 5, 17)

  • Una vez lavados y purificados, se sentaron a la mesa. Tobías dijo a Rafael: «Hermano Azarías, dile a Ragüel que me dé por esposa a mi prima Sara.» (Tobías 7, 9)

  • De madrugada partieron juntos a la boda. Al entrar en la casa de Ragüel, encontraron a Tobías sentado a la mesa; se Tobantó y abrazó a Gabael, que se echó a llorar y le bendijo así: «¡Hombre bueno y honrado, hijo de un hombre honrado y bueno, justo y limosnero! Que el Señor te conceda las bendiciones del ciclo a ti, a tu mujer, al padre y a la madre de tu mujer. ¡Bendito sea Dios, que me ha permitido ver un vivo retrato de mi primo Tobit.» (Tobías 9, 6)


“Viva sempre sob o olhar do Bom Pastor e você ficara’ imune aos pastos contaminados.” São Padre Pio de Pietrelcina