Löydetty 395 Tulokset: Diez Mandamientos

  • Pero si no escuchas la voz del Señor, tu Dios, y no te empeñas en practicar todos los mandamientos y preceptos que hoy te prescribo, caerán sobre ti y te alcanzarán todas estas maldiciones: (Deuteronomio 28, 15)

  • Todas estas maldiciones caerán sobre ti, te perseguirán y te alcanzarán hasta exterminarte, por no haber escuchado la voz del Señor, tu Dios, observando los mandamientos y los preceptos que él te prescribió. (Deuteronomio 28, 45)

  • Entonces tú escucharás de nuevo la voz del Señor y pondrás en práctica todos sus mandamientos, tal como hoy te los prescribo. (Deuteronomio 30, 8)

  • Todo esto te sucederá porque habrás escuchado la voz del Señor, tu Dios, y observado sus mandamientos y sus leyes, que están escritas en este libro de la Ley, después de haberte convertido al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma. (Deuteronomio 30, 10)

  • Si escuchas los mandamientos del Señor, tu Dios, que hoy te prescribo, si amas al Señor, tu Dios, y cumples sus mandamientos, sus leyes y sus preceptos, entonces vivirás, te multiplicarás, y el Señor, tu Dios, te bendecirá en la tierra donde ahora vas a entrar para tomar posesión de ella. (Deuteronomio 30, 16)

  • ¿Cómo podría uno solo desbandar a mil y dos, poner en fuga a diez mil, si su Roca no los hubiera vendido y el Señor no los hubiera entregado? (Deuteronomio 32, 30)

  • El pueblo salió del Jordán el día diez del primer mes, y estableció su campamento en Guilgal, en el extremo oriental de Jericó. (Josué 4, 19)

  • Ha Caín, Guibeá y Timná: en total, diez ciudades con sus poblados. (Josué 15, 57)

  • Así Manasés obtuvo en suerte diez porciones de territorio, además de la región de Galaad y de Basán, que está al otro lado del Jordán, (Josué 17, 5)

  • a los clanes de los otros quehatitas les tocaron en suerte diez ciudades de las tribus de Efraím, de Dan y de la mitad de Manasés. (Josué 21, 5)

  • Eran en total diez ciudades, con sus campos de pastoreo, para los restantes clanes de los quehatitas. (Josué 21, 26)

  • Pero pongan mucho cuidado en practicar los mandamientos y la Ley que les prescribió Moisés, el servidor del Señor, a saber: amar al Señor, su Dios, y seguir todos sus caminos; observar sus mandamientos, mantenerse fieles a él, y servirlo con todo el corazón y con toda el alma". (Josué 22, 5)


“A meditação não é um meio para chegar a Deus, mas um fim. A finalidade da meditação é o amor a Deus e ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina