Löydetty 50 Tulokset: Holofernes

  • Luego Holofernes ordenó a los servidores que estaban en su tienda de campaña que tomaran a Ajior, lo llevaran a Betulia y lo entregaran a los israelitas. (Judit 6, 10)

  • Él les refirió las deliberaciones del Consejo de Holofernes, lo que él mismo había dicho ante los jefes asirios, y las orgullosas amenazas de Holofernes contra el pueblo de Israel. (Judit 6, 17)

  • Al día siguiente, Holofernes ordenó a todo su ejército y a toda la tropa de auxiliares que se habían unido a él, que emprendieran la marcha hacia Betulia, que ocuparan los desfiladeros de la montaña y atacaran a los israelitas. (Judit 7, 1)

  • Al segundo día, Holofernes exhibió toda su caballería delante de los israelitas que estaban en Betulia; (Judit 7, 6)

  • La propuesta satisfizo a Holofernes y a todos sus oficiales, y él decidió proceder de esa manera. (Judit 7, 16)

  • Llámenlos ahora mismo y entreguen la ciudad como botín a Holofernes y a todo su ejército, (Judit 7, 26)

  • Por eso vengo a presentarme ante Holofernes, el general en jefe del ejército, para darle buenas informaciones; yo le indicaré un camino por el que podrá pasar para apoderarse de toda la región montañosa, sin que pierda la vida ni uno solo de sus hombres". (Judit 10, 13)

  • Entonces eligieron a cien de sus hombres, para que la escoltaran, a ella y a su servidora, hasta la carpa de Holofernes. (Judit 10, 17)

  • Cuando se divulgó por el campamento la noticia de su llegada, se produjo una agitación general: todos se acercaban y la rodeaban, mientras ella permanecía fuera de la carpa de Holofernes, esperando que la anunciaran. (Judit 10, 18)

  • Los guardias personales de Holofernes y todos sus oficiales salieron e introdujeron a Judit en la carpa. (Judit 10, 20)

  • Holofernes estaba reclinado en su diván, bajo un dosel de púrpura, recamado en oro, esmeraldas y piedras preciosas. (Judit 10, 21)

  • Cuando apareció Judit delante de él y de sus oficiales, todos quedaron maravillados por la hermosura de su rostro: ella se postró con el rostro en tierra, pero los servidores de Holofernes la levantaron. (Judit 10, 23)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina