Löydetty 940 Tulokset: País
Cubrieron la superficie de todo el país, de manera que este quedó a oscuras; devoraron toda la vegetación y todos los frutos de los árboles que se habían salvado del granizo; y en todo el territorio de Egipto no quedó ni siquiera una brizna de verdor en los árboles y en las plantas del campo. (Exodo 10, 15)
Luego el Señor dijo a Moisés: "El Faraón no los escuchará, para que se multipliquen mis prodigios en el país de Egipto". (Exodo 11, 9)
Moisés y Aarón realizaron todos estos prodigios delante del Faraón; pero el Señor le había endurecido el corazón, y él no dejó partir de su país a los israelitas. (Exodo 11, 10)
Esa noche yo pasaré por el país de Egipto para exterminar a todos sus primogénitos, tanto hombres como animales, y daré un justo escarmiento a los dioses de Egipto. Yo soy el Señor. (Exodo 12, 12)
La sangre les servirá de señal para indicar las casas donde ustedes estén. Al verla, yo pasaré de largo, y así ustedes se librarán del golpe del Exterminador, cuando yo castigue al país de Egipto. (Exodo 12, 13)
Durante esos siete días, no habrá levadura en sus casas, porque todo el que coma algo fermentado, sea extranjero o natural del país, será excluido de la comunidad de Israel. (Exodo 12, 19)
A medianoche, el Señor exterminó a todos los primogénitos en el país de Egipto, desde el primogénito del Faraón -el que debía sucederle en el trono- hasta el primogénito del que estaba preso en la cárcel, y a todos los primogénitos del ganado. (Exodo 12, 29)
Los egipcios, por su parte, urgían al pueblo para obligarlo a salir del país lo antes posible, porque decían: "De lo contrario, todos moriremos". (Exodo 12, 33)
Si un extranjero ha fijado su residencia junto a ti y quiere celebrar la Pascua en honor del Señor, antes deberán ser circuncidados todos los varones de su casa: sólo así podrá acercarse a celebrarla, porque será como el nacido en el país. Pero no la comerá ningún incircunciso. (Exodo 12, 48)
Y cuando el Señor te introduzca en el país de los cananeos, los hititas, los amorreos, los jivitas y los jebuseos, en el país que el Señor te dará porque así lo juró a tus padres -esa tierra que mana leche y miel- celebrarás el siguiente rito en este mismo mes: (Exodo 13, 5)
Cuando el Señor te introduzca en el país de los cananeos, como lo juró a ti y a tus padres, y cuando te lo haya dado, (Exodo 13, 11)
Cuando el Faraón dejó partir al pueblo, Dios no lo llevó por la ruta que atraviesa el país de los filisteos, aunque es la más directa, porque pensó: "Es posible que al verse atacados se arrepientan y regresen a Egipto". (Exodo 13, 17)