Löydetty 508 Tulokset: altar del holocausto

  • Luego el sacerdote hará arder la grasa sobre el altar, y el pecho será para Aarón y sus hijos. (Levítico 7, 31)

  • Este es el ritual del holocausto, de la oblación, del sacrificio por el pecado, del sacrificio de reparación, del sacrificio de la consagración y del sacrificio de comunión, (Levítico 7, 37)

  • Hizo siete aspersiones con óleo sobre el altar, y ungió el altar y todos sus utensilios, la fuente y su base, para consagrarlos. (Levítico 8, 11)

  • y Moisés la inmoló. Entonces tomó la sangre y mojó con el dedo cada uno de los cuernos del altar, para purificarlo. Luego derramó la sangre sobre la base del altar. Así lo consagró, realizando sobre él el rito de expiación. (Levítico 8, 15)

  • En seguida tomó toda la grasa que está sobre las entrañas, la protuberancia del hígado y los dos riñones con su grasa, y los hizo arder sobre el altar. (Levítico 8, 16)

  • Hizo traer, además, el carnero para el holocausto. Aarón y sus hijos impusieron sus manos sobre la cabeza de la víctima, (Levítico 8, 18)

  • y Moisés la inmoló. Luego roció con la sangre todos los costados del altar. (Levítico 8, 19)

  • Después de lavar con agua las entrañas y las patas, Moisés hizo que todo el carnero ardiera sobre el altar, como un holocausto de aroma agradable: era una ofrenda que se quema para el Señor, según la orden que el Señor le había dado. (Levítico 8, 21)

  • Luego mandó que se acercaran los hijos de Aarón, les mojó con un poco de sangre el lóbulo de la oreja derecha, el pulgar de la mano derecha y el pulgar de su pie derecho, y roció con la sangre todos los costados del altar. (Levítico 8, 24)

  • Volvió a tomarlo, y lo hizo arder sobre el altar junto con el holocausto: era un sacrificio de la consagración, un sacrificio de aroma agradable, una ofrenda que se quema para el Señor. (Levítico 8, 28)

  • Moisés tomó en seguida el óleo de la unción y la sangre que estaba sobre el altar, e hizo una aspersión sobre Aarón, sobre sus hijos y sus vestiduras. De esta manera consagró a Aarón, a sus hijos, y también sus vestiduras. (Levítico 8, 30)

  • y dijo a Aarón: "Toma un ternero para un sacrificio por el pecado, y un carnero para un holocausto, ambos sin ningún defecto, y preséntalos delante del Señor. (Levítico 9, 2)


“Nunca se canse de rezar e de ensinar a rezar.” São Padre Pio de Pietrelcina