Löydetty 917 Tulokset: destrucción de jerusalén

  • Tenía treinta y cinco años cuando inició su reinado, y reinó veinticinco años en Jerusalén. Su madre se llamaba Azubá, hija de Siljí. (I Reyes 22, 42)

  • Tenía treinta y dos años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén. (II Reyes 8, 17)

  • Ocozías tenía veintidós años cuando comenzó a reinar, y reinó un año en Jerusalén. Su madre se llamaba Atalía, y era hija de Omrí, rey de Israel. (II Reyes 8, 26)

  • Sus servidores lo trasladaron en un carro a Jerusalén, y lo sepultaron en su tumba, con sus padres, en la Ciudad de David. (II Reyes 9, 28)

  • Comenzó a reinar en el séptimo año de Jehú, y reinó cuarenta años en Jerusalén. Su madre se llamaba Sibia, y era de Berseba. (II Reyes 12, 2)

  • Por ese entonces, Jazael, rey de Arám, subió a combatir contra Gat y se apoderó de ella. Luego Jazael se dispuso a subir contra Jerusalén. (II Reyes 12, 18)

  • Joás, rey de Judá, tomó todos los objetos que habían consagrado Josafat, Jorám y Ocozías, sus padres, reyes de Judá, y los que él mismo había consagrado, así como también todo el oro que había en los tesoros de la Casa del Señor y de la casa del rey, y envió todo eso a Jazael, rey de Arám. Así este se alejó de Jerusalén. (II Reyes 12, 19)

  • Tenía veinticinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veintinueve años en Jerusalén. Su madre se llamaba Iehoadán, y era de Jerusalén. (II Reyes 14, 2)

  • Joás, rey de Israel, tomó prisionero en Bet Semes a Amasías, hijo de Joás, hijo de Ocozías, rey de Judá. Luego fue a Jerusalén y abrió una brecha de doscientos metros en el muro de Jerusalén, desde la puerta de Efraím hasta la puerta del Ángulo. (II Reyes 14, 13)

  • En Jerusalén se urdió una conspiración contra él, y él huyó a Laquis, pero lo hicieron perseguir hasta Laquis y allí le dieron muerte. (II Reyes 14, 19)

  • Después lo trasladaron sobre unos caballos, y fue sepultado con sus padres en Jerusalén, en la Ciudad de David. (II Reyes 14, 20)

  • Tenía dieciséis años cuando comenzó a reinar, y reinó cincuenta y dos años en Jerusalén. Su madre se llamaba Jecolías, y era de Jerusalén. (II Reyes 15, 2)


“Amar significa dar aos outros – especialmente a quem precisa e a quem sofre – o que de melhor temos em nós mesmos e de nós mesmos; e de dá-lo sorridentes e felizes, renunciando ao nosso egoísmo, à nossa alegria, ao nosso prazer e ao nosso orgulho”. São Padre Pio de Pietrelcina