Löydetty 39 Tulokset: diciéndoles

  • Entonces el sacerdote Iehoiadá impartió órdenes a los centuriones encargados de la tropa, diciéndoles: "¡Háganla salir de entre las filas! Si alguien la sigue, que sea pasado al filo de la espada". Porque el sacerdote había dicho: "No la maten en la Casa del Señor". (II Crónicas 23, 14)

  • También puso jefes militares al frente del pueblo, los reunió junto a él en la plaza de la puerta de la ciudad, y los animó diciéndoles: (II Crónicas 32, 6)

  • Hemos interrogado a los ancianos, diciéndoles: ‘¿Quién les dio la orden de edificar esta Casa y de restaurar este Santuario?’. (Esdras 5, 9)

  • Y después de haber deliberado conmigo mismo, dirigí un reproche a los notables y a los magistrados, diciéndoles: "Ustedes imponen una carga a sus hermanos". Luego convoqué contra ellos una gran asamblea, (Nehemías 5, 7)

  • Yo los reprendí y los maldije, golpeé a algunos, les tiré de los cabellos y los conjuré en nombre de Dios, diciéndoles: "¡No entreguen sus hijas a los hijos de ellos, ni se casen con sus hijas, ni ustedes, ni su hijos!". (Nehemías 13, 25)

  • desde donde enviaron una carta a Judas y a sus hermanos, diciéndoles: "Los pueblos que nos rodean se coaligaron para exterminarnos; (I Macabeos 5, 10)

  • Judas les envió un mensaje en son de paz, diciéndoles: "Permítannos pasar por el territorio de ustedes, para ir a nuestro país; nadie les hará ningún mal, sólo queremos pasar". Como ellos se negaron a abrirle, (I Macabeos 5, 48)

  • Nicanor llegó a Jerusalén con un gran ejército, y envió a Judas y sus hermanos un falso mensaje de paz, diciéndoles: (I Macabeos 7, 27)

  • y los exhortó, diciéndoles: "Ustedes saben muy bien todo lo que yo, mis hermanos y la familia de mi padre hemos hecho por las leyes y el Santuario, y las guerras y tribulaciones que hemos soportado. (I Macabeos 13, 3)

  • Y cuando Jeremías se enteró de esto, los reprendió, diciéndoles: "Ese lugar quedará ignorado hasta que Dios tenga misericordia de su pueblo y lo reúna. (II Macabeos 2, 7)

  • Él me dijo: "Profetiza sobre estos huesos, diciéndoles: Huesos secos, escuchen la palabra del Señor. (Ezequiel 37, 4)

  • Por eso, profetiza diciéndoles: Así habla el Señor: Yo voy a abrir las tumbas de ustedes, los haré salir de ellas, y los haré volver, pueblo mío, a la tierra de Israel. (Ezequiel 37, 12)


“Deus sempre nos dá o que é melhor para nós.” São Padre Pio de Pietrelcina