Löydetty 208 Tulokset: Cólera
entre ellos vivíamos también todos nosotros en otro tiempo en medio de las concupiscencias de nuestra carne, siguiendo las apetencias de la carne y de los malos pensamientos, destinados por naturaleza, como los demás, a la Cólera... (Efesios 2, 3)
Toda acritud, ira, cólera, gritos, maledicencia y cualquier clase de maldad, desaparezca de entre vosotros. (Efesios 4, 31)
Que nadie os engañe con vanas razones, pues por eso viene le cólera de Dios sobre los rebeldes. (Efesios 5, 6)
todo lo cual atrae la cólera de Dios sobre los rebeldes, (Colosenses 3, 6)
Mas ahora, desechad también vosotros todo esto: cólera, ira, maldad, maledicencia y palabras groseras, lejos de vuestra boca. (Colosenses 3, 8)
y esperar así a su Hijo Jesús que ha de venir de los cielos, a quien resucitó de entre los muertos y que nos salva de la Cólera venidera. (I Tesalonicenses 1, 10)
impidiéndonos predicar a los gentiles para que se salven; así van colmando constantemente la medida de sus pecados; pero la Cólera irrumpe sobre ellos con vehemencia. (I Tesalonicenses 2, 16)
Dios no nos ha destinado para la cólera, sino para obtener la salvación por nuestro Señor Jesucristo, (I Tesalonicenses 5, 9)
Por eso juré en mi cólera: ¡No entrarán en mi descanso! (Hebreos 3, 11)
De hecho, hemos entrado en el descanso los que hemos creído, según está dicho: Por eso juré en mi cólera: ¡No entrarán en mi descanso! Y eso que las obras de Dios estaban terminadas desde la creación del mundo, (Hebreos 4, 3)
Y dicen a los montes y las peñas: «Caed sobre nosotros y ocultadnos de la vista del que está sentado en el trono y de la cólera del Cordero. (Apocalipsis 6, 16)
Porque ha llegado el Gran Día de su cólera y ¿quién podrá sostenerse?» (Apocalipsis 6, 17)