Löydetty 33 Tulokset: Lámpara
no estaba aún apagada la lámpara de Dios, y Samuel estaba acostado en el Santuario de Yahveh, donde se encontraba el arca de Dios. (I Samuel 3, 3)
Tú eres, Yahveh, mi lámpara, mi Dios que alumbra mis tinieblas. (II Samuel 22, 29)
daré a su hijo una tribu para que quede siempre a David mi siervo una lámpara en mi presencia, delante de mí en Jerusalén, la ciudad que me elegí para poner allí mi Nombre. (I Reyes 11, 36)
Pero en atención a David, le dio Yahveh su Dios una lámpara en Jerusalén, suscitando a su hijo después de él y manteniendo en pie a Jerusalén, (I Reyes 15, 4)
Vamos a hacerle una pequeña alcoba de fábrica en la terraza y le pondremos en ella una cama, una mesa, una silla y una lámpara, y cuando venga por casa, que se retire allí.» (II Reyes 4, 10)
Pero Yahveh no quiso destruir a Judá a causa de David su siervo según lo que le había dicho, que le daría una lámpara en su presencia para siempre. (II Reyes 8, 19)
Pero Yahveh no quiso destruir la casa de David, a causa de la alianza que había hecho con David, porque le había prometido que le daría siempre una lámpara a él y a sus hijos. (II Crónicas 21, 7)
Mandaron a la criada, encendieron la lámpara y abrieron la puerta; y entrando ella vio que estaban acostados juntos y dormidos. (Tobías 8, 13)
¿Cuántas veces la lámpara de los malos se apaga, su desgracia irrumpe sobre ellos, y él reparte dolores en su cólera? (Job 21, 17)
cuando su lámpara brillaba sobre mi cabeza, y yo a su luz por las tinieblas caminaba; (Job 29, 3)
Tú eres, Yahveh, mi lámpara, mi Dios que alumbra mis tinieblas; (Salmos 18, 29)
«Allí suscitaré a David un fuerte vástago, aprestaré una lámpara a mi ungido; (Salmos 132, 17)