Löydetty 1030 Tulokset: Oro
Zorobabel engendró a Abiud, Abiud engendró a Eliakim, Eliakim engendró a Azor, (Mateo 1, 13)
Entraron en la casa; vieron al niño con María su madre y, postrándose, le adoraron; abrieron luego sus cofres y le ofrecieron dones de oro, incienso y mirra. (Mateo 2, 11)
«No os amontonéis tesoros en la tierra, donde hay polilla y herrumbre que corroen, y ladrones que socavan y roban. (Mateo 6, 19)
Amontonaos más bien tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni herrumbre que corroan, ni ladrones que socaven y roben. (Mateo 6, 20)
Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón. (Mateo 6, 21)
Al llegar Jesús a casa del magistrado y ver a los flautistas y la gente alborotando, (Mateo 9, 23)
No os procuréis oro, ni plata, ni calderilla en vuestras fajas; (Mateo 10, 9)
El hombre bueno, del buen tesoro saca cosas buenas y el hombre malo, del tesoro malo saca cosas malas. (Mateo 12, 35)
«El Reino de los Cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo que, al encontrarlo un hombre, vuelve a esconderlo y, por la alegría que le da, va, vende todo lo que tiene y compra el campo aquel.» (Mateo 13, 44)
Jesús le dijo: «Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en los cielos; luego ven, y sígueme.» (Mateo 19, 21)
«¡Ay de vosotros, guías ciegos, que decís: "Si uno jura por el Santuario, eso no es nada; mas si jura por el oro del Santuario, queda obligado!" (Mateo 23, 16)
¡Insensatos y ciegos! ¿Qué es más importante, el oro, o el Santuario que hace sagrado el oro? (Mateo 23, 17)