Löydetty 21 Tulokset: devoró
Ahora, pues, venid, matémosle y echémosle en un pozo cualquiera, y diremos que algún animal feroz le devoró. Veremos entonces en qué paran sus sueños.» (Génesis 37, 20)
Echó cada cual su vara, y se trocaron en serpientes; pero el cayado de Aarón devoró sus varas. (Exodo 7, 12)
Entonces salió de la presencia de Yahveh un fuego que los devoró, y murieron delante de Yahveh. (Levítico 10, 2)
El pueblo profería quejas amargas a los oídos de Yahveh, y Yahveh lo oyó. Se encendió su ira y ardió un fuego de Yahveh entre ellos y devoró un extremo del campamento. (Números 11, 1)
Brotó fuego de Yahveh, que devoró a los 250 hombres que habían ofrecido el incienso. (Números 16, 35)
La tierra abrió su boca y los tragó a ellos y a Coré, cuando el fuego devoró a 250 hombres, para que sirvieran de escarmiento. (Números 26, 10)
La batalla se extendió por todo aquel contorno y aquel contorno y aquel día devoró el bosque más hombres que la espada. (II Samuel 18, 8)
Cayó el fuego de Yahveh que devoró el holocausto y la leña, y lamió el agua de las zanjas. (I Reyes 18, 38)
Respondió Elías y dijo al jefe de cincuenta: «Si soy hombre de Dios, que baje fuego del cielo y te devore a ti y a tus cincuenta.» Bajó fuego del cielo que le devoró a él y a sus cincuenta. (II Reyes 1, 10)
Respondió Elías y le dijo: «Si soy hombre de Dios, que baje fuego del cielo y te devore a ti y a tus cincuenta.» Bajó fuego del cielo que le devoró a él y a sus cincuenta. (II Reyes 1, 12)
Cuando Salomón acabó de orar, bajó fuego del cielo que devoró el holocausto y los sacrificios; y la gloria de Yahveh llenó la Casa. (II Crónicas 7, 1)
El fuego devoró a sus jóvenes, no hubo canto nupcial para sus vírgenes; (Salmos 78, 63)