Löydetty 190 Tulokset: número de la bestia
Porque el hombre y la bestia tienen la misma suerte: muere el uno como la otra; y ambos tienen el mismo aliento de vida. En nada aventaja el hombre a la bestia, pues todo es vanidad. (Eclesiastés 3, 19)
¿Quién sabe si el aliento de vida de los humanos asciende hacia arriba y si el aliento de vida de la bestia desciende hacia abajo, a la tierra? (Eclesiastés 3, 21)
La ancianidad venerable no es la de los muchos días ni se mide por el número de años; (Sabiduría 4, 8)
dame la Sabiduría, que se sienta junto a tu trono, y no me excluyas del número de tus hijos. (Sabiduría 9, 4)
Y aun sin esto, de un simple soplo podían sucumbir, perseguidos por la Justicia, aventados por el soplo de tu poder. Pero tú todo lo dispusiste con medida, número y peso. (Sabiduría 11, 20)
El número de los días del hombre mucho será si llega a los cien años. (Eclesiástico 18, 9)
Feliz el marido de mujer buena, el número de sus días se duplicará. (Eclesiástico 26, 1)
La vida del hombre tiene días contados, mas los días de Israel no tienen número. (Eclesiástico 37, 25)
De igual modo el alfarero sentado a su tarea y dando a la rueda con sus pies, preocupado sin cesar por su trabajo, toda su actividad concentrada en el número; (Eclesiástico 38, 29)
Para toda carne, del hombre hasta la bestia, mas para los pecadores siete veces más: (Eclesiástico 40, 8)
piedras preciosas, grabadas como sellos, en engaste de oro, obra de joyero, para memorial por la escritura grabada, según el número de las tribus de Israel; (Eclesiástico 45, 11)
Serán dejados juntamente a merced de las aves rapaces de los montes y de las bestias de la tierra; pasarán allí el verano las rapaces y toda bestia terrestre allí invernará. (Isaías 18, 6)