Löydetty 363 Tulokset: noche

  • Volví a subir, pues, de noche, por el Torrente, inspeccionando la muralla, y volví a entrar por la puerta del Valle. Así regresé a casa. (Nehemías 2, 15)

  • Pero invocamos a nuestro Dios y montamos guardia contra ellos de día y de noche. (Nehemías 4, 3)

  • Dije también entonces al pueblo: «Todos pasarán la noche en Jerusalén con sus criados, y así haremos guardia de noche y trabajaremos de día.» (Nehemías 4, 16)

  • Había ido yo a casa de Semaías, hijo de Delaías, hijo Mehetabel, que se encontraba detenido. Dijo él: «Démonos cita en la Casa de Dios, en el interior del santuario; cerremos las puertas del santurario; porque van a venir a matarte, esta misma noche vienen a matarte.» (Nehemías 6, 10)

  • Con columna de nube los guiaste de día, con columna de fuego por la noche, para alumbrar ante ellos el camino por donde habían de marchar. (Nehemías 9, 12)

  • Tú, en tu inmensa ternura, no los abandonaste en el desierto: la columna de nube no se apartó de ellos, para guiarles de día por la ruta, ni la columna de fuego por la noche, para alumbrar ante ellos el camino por donde habían de marchar. (Nehemías 9, 19)

  • Una o dos veces, algunos mercaderes que vendían toda clase de mercancías pasaron la noche fuera de Jerusalén, (Nehemías 13, 20)

  • pero yo les avisé diciéndoles: «¿Por qué pasáis la noche junto a la muralla? ¡Si volvéis a hacerlo, os meteré mano!» Desde entonces no volvían más en sábado. (Nehemías 13, 21)

  • Aquella misma noche, después de bañarme, salí al patio y me recosté contra la tapia, con el rostro cubierto a causa del calor. (Tobías 2, 9)

  • Partió el muchacho en compañía del ángel, y el perro les seguía. Yendo de camino, aconteció que una noche acamparon junto al río Tigris. (Tobías 6, 2)

  • dijo Rafael al joven: «Hermano Tobías.» Le respondió: «¿Qué deseas?» Contestó él: «Pararemos esta noche en casa de Ragüel; es pariente tuyo y tiene una hija que se llama Sarra; (Tobías 6, 11)

  • Y añadió: «Es justo que la tomes para ti. Escúchame, hermano. Yo hablaré esta noche al padre acerca de la muchacha para que te la conceda como prometida, y a nuestro regreso de Ragués celebraremos la boda. Estoy seguro de que Ragüel no puede negártela, ni dársela a otro, pues se haría reo de muerte, según la sentencia del libro de Moisés, pues él sabe que te asiste el derecho a tomar a su hija por mujer. Así pues, óyeme bien, hermano; hablaremos esta noche sobre la muchacha y que la den como prometida; y cuando volvamos de Ragués, la tomaremos y la llevaremos con nosotros a tu casa.» (Tobías 6, 13)


“Um dia você verá surgir o infalível triunfo da justiça Divina sobre a injustiça humana”. São Padre Pio de Pietrelcina