Löydetty 70 Tulokset: recibido

  • Fueron ellos donde el sumo sacerdote Jilquiás y le entregaron el dinero traído a la Casa de Dios, que los levitas y porteros habían recibido de Manasés y de Efraím y de todo el resto de Israel, de todo Judá y Benjamín y de los habitantes de Jerusalén. (II Crónicas 34, 9)

  • Voy a reunirte con tus padres y serás recibido en paz en tu sepulcro; y no verán tus ojos ninguno de los males que voy a traer sobre este lugar y sus moradores.» Ellos llevaron la respuesta al rey. (II Crónicas 34, 28)

  • El saqueó sus santuarios y taló sus bosques sagrados, pues había recibido la orden de destruir todas las divinidades del país para que todas las gentes adorasen únicamente a Nabucodonosor y todas las lenguas y todas las tribus le proclamasen dios. (Judit 3, 8)

  • Después se levantó y se engalanó con sus vestidos y todos sus ornatos femeninos. Se adelantó su sierva para extender en tierra, frente a Holofernes, los tapices que había recibido de Bagoas para el uso cotidiano, con el fin de que pudiera tomar la comida reclinada sobre ellos. (Judit 12, 15)

  • fue recibido por nosotros como huésped y tratado con aquella humanidad que nosotros usamos con todos los pueblos, a tal punto que era públicamente llamado «nuestro padre» y había obtenido el segundo puesto en el reino; todos se postraban ante él; (Ester 16, 11)

  • Yahveh mi fuerza, escudo mío, en él confió mi corazón y he recibido ayuda: mi carne de nuevo ha florecido, le doy gracias de todo corazón. (Salmos 28, 7)

  • Tú has subido a la altura, conduciendo cautivos, has recibido tributo de hombres, hasta los rebeldes para que Yahveh Dios tuviera una morada. (Salmos 68, 19)

  • El rey Demetrio, viendo que el país estaba en calma bajo su mando y que nada le ofrecía resistencia, licenció todas sus tropas mandando a cada uno a su lugar, excepto las tropas extranjeras que había reclutado en las islas de las naciones. Todas las tropas que había recibido de sus padres se enemistaron con él. (I Macabeos 11, 38)

  • Hemos recibido la corona de oro y la palma que nos habéis enviado y estamos dispuestos a concertar con vosotros una paz completa y a escribir a los funcionarios que os concedan la remisión de las deudas. (I Macabeos 13, 37)

  • pues había sabido que los romanos llamaban a los judíos amigos, aliados y hermanos, que habían recibido con honor a los embajadores de Simón (I Macabeos 14, 40)

  • Fue magníficamente recibido por Jasón y por la ciudad, e hizo su entrada entre antorchas y aclamaciones. Después de esto llevó sus tropas hasta Fenicia. (II Macabeos 4, 22)

  • y el recibido en Babilonia, en la batalla contra los gálatas, cuando entraron en acción todos los 8.000 judíos junto a los 4.000 macedonios, y cuando los macedonios se hallaban en apuros, los 8.000 derrotaron a 120.000, gracias al auxilio que les llegó del cielo, y se hicieron con un gran botín. (II Macabeos 8, 20)


“A caridade é o metro com o qual o Senhor nos julgará.” São Padre Pio de Pietrelcina