Löydetty 8 Tulokset: Guardianes

  • El rey ordenó al sumo sacerdote Jelcías, al sacerdote segundo y a los guardianes de la puerta sacar fuera del templo del Señor todos los utensilios del culto de Baal, de Aserá y de los astros del cielo; los quemó a las afueras de Jerusalén en los campos del Cedrón y llevó sus cenizas a Betel. (II Reyes 23, 4)

  • El jefe de la escolta apresó al sumo sacerdote Serayas, al sacerdote segundo Sofonías y a los tres guardianes de la puerta, (II Reyes 25, 18)

  • Los porteros: Acub, Talmón y sus hermanos, guardianes de las puertas: ciento sesenta y dos. (Nehemías 11, 19)

  • cuando tiemblen los guardianes de la casa, y se encorven los hombres fuertes, y cesen de moler las mujeres porque son demasiado pocas, y pierdan la vista las que miran por las ventanas, (Eclesiastés 12, 3)

  • Nuestros guardianes están todos ciegos, no comprenden nada; son todos perros mudos, que no saben ladrar; siempre tumbados, sólo dormir les gusta. (Isaías 56, 10)

  • El jefe de la escolta apresó al sumo sacerdote, Serayas; al segundo sacerdote, Sofonías, y a los tres guardianes del umbral del templo. (Jeremías 52, 24)

  • Tus guardianes son como las langostas; tus funcionarios como enjambres de insectos, que se posan en las tapias en los días de frío. Sale el sol y levantan el vuelo sin que se sepa dónde han ido. (Nahún 3, 17)

  • Cuidad de vosotros y de todo el rebaño del que el Espíritu Santo os ha constituido como guardianes para apacentar la Iglesia de Dios, que ha adquirido con su propia sangre. (Hechos 20, 28)


“Diante de Deus ajoelhe-se sempre.” São Padre Pio de Pietrelcina