Löydetty 72 Tulokset: dirás

  • y les dirás: Esto dice el Señor todopoderoso: Así romperé yo a este pueblo y a esta ciudad, como se hace añicos un vaso de alfarero que ya no puede recomponerse. Y se enterrará en Tofet por falta de sitio en otra parte. (Jeremías 19, 11)

  • Y a este pueblo le dirás: Esto dice el Señor: Mirad, yo pongo ante vosotros el camino de la vida y el de la muerte. (Jeremías 21, 8)

  • Dirás a la casa real de Judá: Escuchad la palabra del Señor: (Jeremías 21, 11)

  • Y les dirás: "Esto dice el Señor todopoderoso, Dios de Israel: ¡Bebed, emborrachaos, vomitad, caed para no levantaros más bajo la espada que yo voy a enviar en medio de vosotros". (Jeremías 25, 27)

  • Y si se niegan a tomar de tu mano la copa y a beber, les dirás: "Esto dice el Señor todopoderoso: ¡La beberéis sin remedio! (Jeremías 25, 28)

  • Les dirás: Esto dice el Señor: Si no me hacéis caso, siguiendo la ley que yo os prescribo, (Jeremías 26, 4)

  • Y contra Joaquín, rey de Judá, dirás: Esto dice el Señor: Tú has quemado este libro, diciendo: ¿Por qué has escrito en él: Vendrá sin remedio el rey de Babilonia, devastará este país y exterminará de él hombres y animales? (Jeremías 36, 29)

  • les dirás: Yo sólo he suplicado humildemente al rey que no me haga volver a casa de Jonatán a morir allí". (Jeremías 38, 26)

  • Esto dice el Señor: Le dirás: Lo que había construido, lo destruyo; lo que había plantado, lo arranco. Voy a herir a toda la tierra. (Jeremías 45, 4)

  • Y dirás: ¡Señor! Tú mismo has sentenciado que este lugar será destruido y que nadie lo volverá a habitar; ni hombre, ni bestia, sino que será un perpetuo desierto. (Jeremías 51, 62)

  • Hijos de cara dura y corazón de piedra son aquellos a quienes yo te envío. Les dirás: Esto dice el Señor Dios. (Ezequiel 2, 4)

  • Pero cuando yo te hable, abriré tu boca y les dirás: Así habla el Señor; quien quiera escuchar escuche, quien no quiera no escuche; porque son una raza de rebeldes". (Ezequiel 3, 27)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina