Löydetty 536 Tulokset: entrada en el reino

  • de las cortinas del atrio, de la portezuela de entrada al atrio, que rodea la morada y el altar, y de las cuerdas necesarias para todo el servicio. (Números 3, 26)

  • las cortinas del atrio, la portezuela de entrada del atrio que rodea la tienda y el altar, las cuerdas y todos los accesorios necesarios para su servicio. Y harán con ellos todo lo que sea necesario. (Números 4, 26)

  • y el día octavo presentará al sacerdote dos tórtolas o dos pichones a la entrada de la tienda de la reunión. (Números 6, 10)

  • Éste será el ritual del nazireo: el día en que se cumpla el tiempo de su nazireato, el sacerdote lo llevará a la entrada de la tienda de la reunión (Números 6, 13)

  • El nazireo se afeitará su cabeza consagrada a la entrada de la tienda de la reunión, y tomando los cabellos de su cabeza consagrada, los echará al fuego que arde bajo el sacrificio de reconciliación. (Números 6, 18)

  • El Señor bajó en la columna de nube y se paró a la entrada de la tienda. Llamó a Aarón y a María, y los dos se acercaron. (Números 12, 5)

  • Fueron y exploraron toda la tierra desde el desierto de Sin hasta el Rejob, junto a la entrada de Jamat. (Números 13, 21)

  • Cada uno tomó su incensario, puso fuego y colocó encima el incienso, y se presentaron a la entrada de la tienda de la reunión, juntamente con Moisés y Aarón. (Números 16, 18)

  • Cuando Coré hubo reunido frente a Moisés y Aarón toda la comunidad a la entrada de la tienda de la reunión, la gloria del Señor se apareció a toda la comunidad. (Números 16, 19)

  • Se alejaron de la tienda de Coré, Datán y Abirán. Datán y Abirán habían salido, y estaban a la entrada de sus tiendas con sus mujeres, sus hijos y sus pequeños. (Números 16, 27)

  • Moisés y Aarón se apartaron de la comunidad hacia la entrada de la tienda, y se les apareció la gloria del Señor. (Números 20, 6)

  • El agua desborda de los cubos, sus sembrados son abundantemente regados. Su rey es más fuerte que Agag, su reino crece en poderío. (Números 24, 7)


Jesus lhe quer bem, da maneira que só Ele sabe amar.” São Padre Pio de Pietrelcina