Löydetty 224 Tulokset: fiesta de los panes sin levadura

  • Estaban encargados también de los panes de la proposición, de la flor de harina para la ofrenda, de las tortas de pan sin levadura, de las tortas fritas y cocidas y de las medidas de capacidad y longitud. (I Crónicas 23, 29)

  • el oro en lingotes destinado a las mesas de los panes de la proposición, para cada una de las mesas, la plata para las mesas de plata; (I Crónicas 28, 16)

  • También yo estoy para construir un templo al nombre del Señor, mi Dios, para consagrarlo a él, quemar incienso y aromas ante él, tener siempre ante él los panes de la proposición, ofrecer holocaustos diarios, mañana y tarde, los sábados, los novilunios y las demás fiestas del Señor, nuestro Dios; así se hará siempre en Israel. (II Crónicas 2, 3)

  • Salomón hizo todos los demás utensilios para el templo de Dios: el altar de oro y las mesas sobre las que se ponían los panes de la proposición; (II Crónicas 4, 19)

  • Se reunieron en torno al rey Salomón todos los israelitas en la fiesta del séptimo mes. (II Crónicas 5, 3)

  • En aquella ocasión Salomón, y con él la inmensa comunidad de Israel venida desde la entrada de Jamat hasta el torrente de Egipto, celebraron la fiesta durante siete días. (II Crónicas 7, 8)

  • El octavo día celebraron asamblea solemne, pues la dedicación del altar había durado siete días, y luego otros siete días de fiesta. (II Crónicas 7, 9)

  • ajustándose a las prescripciones de Moisés respecto de los holocaustos de cada día, de los sábados, de los novilunios y de las tres solemnidades del año: fiesta de los panes sin levadura, fiesta de las semanas y fiesta de los tabernáculos. (II Crónicas 8, 13)

  • Ofrecen diariamente holocaustos al Señor, mañana y tarde, queman perfumes aromáticos, ponen los panes de la proposición sobre la mesa limpia y encienden todas las tardes el candelabro de oro con sus lámparas; seguimos cumpliendo las disposiciones del Señor, nuestro Dios, que vosotros habéis abandonado. (II Crónicas 13, 11)

  • Todo el pueblo hizo fiesta, y la ciudad recobró la tranquilidad. Atalía había muerto a espada. (II Crónicas 23, 21)

  • Se presentaron entonces al rey Ezequías y le dijeron: "Hemos purificado todo el templo, el altar de los holocaustos y todos sus utensilios, la mesa de los panes de la proposición con todos sus accesorios; (II Crónicas 29, 18)

  • Acudió a Jerusalén una gran multitud de gente para celebrar la fiesta de los panes sin levadura en el segundo mes. (II Crónicas 30, 13)


“Padre, eu não acredito no inferno – falou um penitente. Padre Pio disse: Acreditará quando for para lá?” São Padre Pio de Pietrelcina