I Samuel, 24
17. Cuando David terminó de dirigir estas palabras a Saúl, este exclamó: "¿No es esa tu voz, hijo mío, David?", y prorrumpió en sollozos.
17. Cuando David terminó de dirigir estas palabras a Saúl, este exclamó: "¿No es esa tu voz, hijo mío, David?", y prorrumpió en sollozos.
“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina