31. Mientras tanto, Guejazí se les había adelantado y había puesto el bastón sobre el rostro del muchacho, pero este no dio señales de vida. Volvió entonces a presentarse ante Eliseo y le comunicó: "El muchacho no se ha despertado".





“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina