3. Judá está desterrada, en la miseria y en la más dura esclavitud. Ella habita entre las naciones, sin encontrar un descanso. Todos sus perseguidores la alcanzaron en angostos desfiladeros.





“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina