11. Mi vida se consume de tristeza, mis años, entre gemidos; mis fuerzas decaen por la aflicción y mis huesos están extenuados.





“É doce o viver e o penar para trazer benefícios aos irmãos e para tantas almas que, vertiginosamente, desejam se justificar no mal, a despeito do Bem Supremo.” São Padre Pio de Pietrelcina