32. Yahveh entregó Lakís en manos de Israel, que la tomó al seguno día, y la pasó a cuchillo con todos los seres vivientes que había en ella, lo mismo que había hecho con Libná.





“Você teme um homem,um pobre instrumento nas mãos de Deus, mas não teme a justiça divina?” São Padre Pio de Pietrelcina