2. Se trata de un pueblo numeroso, de estatura gigantesca, descendiente de los anaquitas, que tú ya conoces y de los cuales has oído decir: ¿Quién podrá mantenerse firme ante los hijos de Anac?





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina