2. Y dijo al hombre vestido de lino: "Métete por entre las ruedas, debajo del querubín, toma a manos llenas brasas ardientes de entre los querubines y espárcelas por la ciudad". Y vi que entró.





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina